Recurrí a mi lista privé, donde voy acumulando datos, comentarios de mesas cercanas en un almuerzo, clases de yoga, conversaciones de café…al fin y al cabo, así parece que se encuentra la "posta" como quién mal diría y reservé.
Los restaurantes étnicos me parecen una gran opción y hacia allá fuimos por el 1147 de la Avenida Córdoba en pleno centro. Propiedad de Noor Mohamed, que llegó hace 20 años a la Argentina y supo trasladar todos los sabores del norte de su país a nuestra bulliciosa capital, entramos a probar las delicias hindúes en DELHI MAHAL
Vale aclarar y para no ser errónea con el término, el gentilicio "hindú" e "indio" puede referirse tanto a los habitantes de la India como a las personas que profesan el hinduismo, así que pueden usar los dos términos sin culpa alguna.
Nos encontramos a las 22 h. Sabrán disculpar mis compañeras que se están enterando en este preciso instante, que todo estuvo fríamente calculado: si había que probar algo diferente tenía que ser con las condiciones más parecidas a las del país de origen, calor sofocante de por medio y ventiladores de techo.
Mesita al lado de la ventana, música bollywood style (no sé si este será un Sandro de la India pero algo así Tunak Tunak), bijouterie a la venta y grupo indio detrás de la barra, nos adentramos en la Delhi porteña.
El primer traspié de la cena fue pedir las bebidas y que nos digan "No tenemos agua sin gas." ¿Cómooooo?, ¿vamos a comer un curry con 40 grados a la sombra y no hay agua? Así mismo fue. No pude con mi genio y salí a comprar 2 botellas de litro al kiosco. Querido Noor queremos creer que no se va a volver a repetir, ¿verdad? Abandonamos el vino y habilitamos la limonada y la cerveza.
Nos trajeron la carta y ahí sí que pedimos ayuda; la cantidad y variedad de platos es increíble. El chico que nos atendió nos recomendó y nos explicó todo con el más mínimo detalle.
El "naan", pan típico hecho con el tandoor (horno de barro vertical tradicional) viene con salsas de yoghurt y la coloradita, de temer, más picante.
De entradas pedimos el Paneer Pakora, queso hecho en casa rebozado con especias.
Y el Masala mix, que tiene degustación de samosas, cebollas crocantes, Mix de Pakora de vegetales y Pakora de Pollo.
Ya en los principales pedimos el Ghost Saag Wala, que es un curry de cordero con azafrán, espinaca y especias y viene acompañado con menta y arroz blanco.
Un Tikka Masala, curry de pollo macerado con yoghurt y asado en tandoor.
Un Veg Biryani que son variedad de verduras frescas, cebolla de verdeo y queso hecho en casa, obvio con arroz blanco.
Un Pulau, arroz cocinado con azafran y mezcla suave de verduras.
Con respecto al picante y compensando el tema "agua", si no te gustó el plato o está muy picante, te lo cambian al instante. Damos fe porque así sucedió. En el grupo tenemos las "lengua de amianto" y "las flojitas", sobre gustos...
Para el postre pedimos el Pista Kulfi, que es helado de pistachos y almendras.
Y estas bolas un poco escatológicas llamadas "Gulab Jamón", que son bombitas de leche en almíbar perfumadas con azafrán.