Grupo Gourmet de Argentina: diciembre 2013

Escuchar en esta época del año "Qué rápido pasa el tiempo" es casi una oda a las frases trilladas. Y si bien el calendario es el mismo y los días siempre tienen 24 horas, la percepción del tiempo parece ir mutando.

Algunas teorías explican que la sensación de velocidad tiene directa relación con el apabullante incremento de los estímulos culturales: hay más cosas para hacer, más libros para leer, más lugares para conocer, y así, claro, el tiempo (fenómeno subjetivo) parece no alcanzar.

Me gusta retomar al catastrófico pero brillante Paul Virilio, que dijo en alguna oportunidad: "La de, cuanto más rápido mejor, es una afirmación falsa. Cuanto más rápido vas, más riesgos corres. La velocidad reduce el ángulo de visión". Por tal motivo llego a la conclusión de que creamos inconscientemente los encuentros gourmets para eso…detener el tiempo.

Cada cita desde hace dos años es el compromiso y el disfrute, las ganas de frenar el día agotador en una cena mágica entre amigas, disfrutando y saboreando los platos que alguna de nosotras eligió para compartir desinteresadamente.

Llegó el último encuentro del año 2013, ese que elegimos entre todas y que se ha convertido en la frutillita del postre, el bombín chaplinero, el desembolso de los morlacos. Y sí, este año elegimos al reconocido y top 5 "CHILA".

Ubicado en la bucólica, y un tanto turística, Avenida Alicia Moreau de Justo y bajo la supervisión de la chef argentina Soledad Nardelli, se encuentra este recinto que ellos definen como un restaurant de alta cocina basada en productos argentinos únicos por su origen, estacionalidad y calidad del productor.

En cuanto a la propuesta arquitectónica, coincidimos en que el espacio peca de ostentoso, no resulta acogedor y no se destaca por su buen gusto ni originalidad del resto de las ofertas de la cuadra. Por el contrario resaltamos la idea de mostrar el trabajo de los más de 10 chefs gracias a la cocina vidriada, y la vajilla y los cubiertos portugueses CUTIPOL, impecables.

Nos dieron una linda mesa redonda frente al río y de a poco fuimos revisando el menú. Nos decidimos por el menú degustación 3 pasos que incluye, una entrada, un plato principal y el postre (hay otro de 7 pasos).

Entre las 6 opciones de entrada, 7 de plato principal y 6 postres, los ganadores fueron:

Paso 1
Langostinos de Puerto Madryn + maní + especias.
Molleja de vaca + maíces.
San Juan: aceite de oliva + olivas+ tomate + ajo negro + pistachos + melón.

Paso 2
Boga de río Paraná + nueces de pecan + eucalipto.
Merluza negra del cono Antártica + albahacas + almendra + azafrán de Caroya.
Buenos Aires: bife madurado 28 días + trigos + pasto + queso Lincoln.

Paso 3
Frutillas + yogurt de cabra.
Chocolate + algarroba.
Souffle de dulce de leche + helado de crema americana + licor de huevo y Hesperidina.
Queso y dulce + Anita.

En líneas generales, esperábamos mucho más, teniendo en cuenta la relación precio-calidad. La atención de los camareros deja mucho que desear para un restaurant que se quiere posicionar como lo mejor de Buenos Aires. Resulta forzada, desordenada y poco profesional. Destacamos, por otro lado, el trabajo que viene realizando Soledad, en la idea de lograr una identidad gastronómica argentina creando un menú en base a productos que se
cultivan en las diferentes regiones de nuestro país (gran detalle: nos regalaron un mapa impreso de Argentina que plasma en imagen este concepto)

Logramos detener el tiempo con un brindis en el que cada una supo expresar anhelos, deseos e ilusiones para el próximo año.
Nuestro Grupo Gourmet es un hecho y sigue creciendo. Queremos agradecerles a todos por acompañarnos y seguir este espacio.